Siempre que escucho por los altavoces del parque de atracciones que se ha perdido un niño,
pienso que ese niño soy yo

23 de mayo de 2013

Necesito pasión

Necesito pasión, necesito no sentir más de lo mismo, me da asco la rutina y por eso siempre huyo de ella. Siempre lo mismo, los mismos programas de televisión, con los mismos presentadores y las mismas memeces. Me dan asco los trabajos sin alma, el amor sin amor, los buenos deseos de navidad cada navidad o el obligatorio bronceado de cada verano. No quiero que me den fingidos buenos días cuando no son buenos... cuando ni siquiera son días. No aguanto la rutina, la sensación de lo ya visto, de lo ya vivido, de lo ya oído mil veces.
Necesito pasión para sentirme vivo, para que todo me sepa de manera distinta. Necesito pasión para entregarme sin miedo y sin remordimiento a la vida, necesito pasión porque me da asco la rutina.
Necesito pasión, y la respuesta está en el viento....



La soledad no está tan sola


Y ahora que el sol se va, la soledad se arregla, se pinta, se pone un ceñido traje de noche y sale dispuesta a visitarte. 
La soledad se toma una copa con vigilante nocturno. Escucha a una chica que llora mientras espera el autobús. Besa a un mendigo y le da las buenas noches. Charla con una prostituta aburrida. Duerme con un presidiario sin sueño mientras le cuenta cómo va todo fuera. La soledad acompaña al camionero unos kilómetros, entra en los hospitales, tontea con taxistas, visita a un anciano enfermo. La soledad acuna a un niño que despierta con miedo en la cuna. La soledad va de un lado a otro sin descansar.
La soledad no está tan sola, no ves que a mi no me abandona?